Alemania estudia un innovador plan de ahorro: pagas de 10 euros mensuales a los menores de edad para su jubilación
El canciller, Friedrich Merz, defiende que esta medida "costaría menos que las subvenciones federales cada vez más elevadas al seguro de pensiones" y permitiría a cada alemán "constituir un capital propio".

La crisis que atraviesa Alemania con las pensiones ha dado lugar una medida inédita. El canciller, Friedrich Merz, sorprendió a todos con el consejo que lanzó a los jóvenes alemanes de emenzar a ahorrar lo antes posible para garantizar su jubilación, así como con su propuesta para ayudarles a hacerlo. "Comenzad hoy mismo", les dijo.
Esta recomendación no es casual. Alemania, como el resto de Europa, enfrenta una presión demográfica que pone en jaque la sostenibilidad del sistema público de pensiones. Las proyecciones indican que, a finales de 2025, se habrán jubilado casi 20 millones de 'boomers', mientras menos de 13 millones de trabajadores se incorporarán al mercado laboral.
Disparidad de propuestas
Actualmente, las pensiones absorben ya una cuarta parte de los presupuestos federales y la reforma, aunque inevitable, sigue posponiéndose. Dentro de la coalición que Merz comparte con los socialdemócratas del SPD, las propuestas son dispares.
La ministra de Trabajo, Bärbel Bas, defiende asegurar el nivel de pensiones en el 48% del salario, mientras que la ministra de Economía, Khaterine Reiche, apuesta por retrasar la edad de jubilación. "No puede ir bien a largo plazo que solo trabajemos dos tercios de nuestra vida adulta y pasemos un tercio en la jubilación: tenemos que trabajar más y más tiempo", afirma a Frankfurter Allgemeine.
Merz, sin embargo, se inclina por fórmulas de ahorro privado y ha presentado su propio plan: el "diez euros al mes". A partir de 2026, los niños de entre 6 y 18 años recibirían del Estado una aportación mensual destinada a una cuenta de inversión que acumularía hasta 1.440 euros en doce años.
Los intereses generados estarían libres de impuestos hasta la edad de jubilación, fijada actualmente en 67 años. La iniciativa, con un coste estimado de 1.500 millones de euros anuales, busca fomentar la educación financiera y crear una base de ahorro que se capitalice durante más de seis décadas. Merz defiende que este plan "costaría menos que las subvenciones federales cada vez más elevadas al seguro de pensiones" y permitiría a cada alemán "constituir un capital propio".
"Queremos que la próxima generación se familiarice con los mercados de capitales desde el principio. El nuevo plan, con el tiempo, también ayudará a mitigar el déficit del sistema de pensiones estatales", afirma al Financial Times Carsten Linnemann, secretario general del partido CDU de Merz y hombre de confianza del canciller.
El influyente sindicato alemán IG Metall criticó duramente la postura de Merz, calificándola de "alejada de la realidad y potencialmente peligrosa". En lugar de impulsar sistemas de pensiones privadas basadas en inversiones bursátiles, el sindicato considera que se debería reforzar el sistema público de pensiones, que actualmente atraviesa una etapa complicada.
¿De dónde surge esta idea?
La idea de ofrecer 10 euros mensuales como incentivo fue propuesta por Ulrike Malmendier, experta en finanzas en la Universidad de Californa en Berkeley y miembro del Consejo de Expertos Económicos. "Si inviertes en una cartera ampliamente diversificada y adoptas una perspectiva a 30 años, entonces tendrás prácticamente garantizada una rentabilidad decente", señala también a Financial Times.
Aunque este principio ha sido respaldado por numerosos estudios académicos, Malmendier señala que "mucha gente en Alemania simplemente no lo ha comprendido del todo". "Como profesor de finanzas, puedo explicarlo teóricamente, pero es mejor que la gente lo experimente por sí misma", añade.
El Bundesbank estima que los hogares de alemanes acumulan un total de 9 billones de euros en activos financieros, de los cuales el 37% permanece en efectivo o en cuentas bancarias con bajos rendimientos.
