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Rusia entra en cólera con el país que ofrece a Europa las armas clave para proteger todo el continente

Rusia entra en cólera con el país que ofrece a Europa las armas clave para proteger todo el continente

Francia pone a disposición de Europa la idea de extender su paraguas nuclear al continente ante el distanciamiento de Estados Unidos y su cercanía con Moscú.

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, en una imagen tomada en el Kremlin en 2018.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, en una imagen tomada en el Kremlin en 2018.Mikhail Svetlov

El presidente francés, Emmanuel Macron, ha puesto sobre la mesa una idea que podría cambiar el tablero de la seguridad continental: extender el paraguas nuclear de Francia al resto de Europa. Un movimiento excepcional que surge, precisamente, cuando la Unión Europea está fraguando su rearme, en un momento en el que EEUU ha dado muestras de no ser ya el aliado político en el que se había apoyado y con el que había contado el Viejo Continente hasta ahora, cuando un Donald Trump que, en su regreso a la Casa Blanca, ha  reiniciado los contactos diplomáticos bilaterales con Rusia, buscando el acercamiento con Moscú y el presidente ruso, Vladimir Putin. 

Francia y Reino Unido son las únicas potencias nucleares de Europa, y Emmanuel Macron ha sugerido que el arsenal galo podría convertirse en un escudo protector para el resto de los países miembros de la Unión Europea. Sin embargo, la idea del presidente francés no ha sentado bien en todos los rincones. La líder de la ultraderechista Agrupación Nacional, Marine Le Pen, ya ha criticado la propuesta, señalando que el poder nuclear francés no se debe compartir ni tampoco se debe delegar. El ministro de Defensa francés, Sébastien Lecornu, ya ha aclarado que la oferta incluye que,, aunque las armas nucleares se desplieguen fuera de Francia, seguirán bajo control exclusivo del país.

La reacción de Moscú: "Es una amenaza directa"

A pesar de la oposición interna, la reacción más contundente ha llegado desde Moscú. El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, no ha dudado en calificar la propuesta de Macron como una "amenaza directa" para Rusia. "Si él nos ve como una amenaza y habla de prepararse para usar armas nucleares contra nosotros, por supuesto que es una amenaza", declaró Lavrov con firmeza.

Macron no está solo en esta iniciativa. El futuro canciller alemán, Friedrich Merz, ya había mencionado en febrero la necesidad de que Reino Unido y Francia extiendan su paraguas nuclear a Alemania. Actualmente, Francia cuenta con un arsenal que se acerca a las 290 cabezas nucleares, mientras que Reino Unido tiene aproximadamente 225. Ambos países mantienen sus arsenales bajo control independiente, aunque colaboran con la OTAN en el marco de una estrategia de disuasión más amplia.

La diferencia entre las armas nucleares francesas y británicas respecto a las que tiene ya desplegadas Estados Unidos en Europa es notable. Mientras que las de Francia y Reino Unido son estratégicas, diseñadas para provocar la destrucción masiva, las de Estados Unidos son tácticas, un poder destructivo menor, destinadas a objetivos más específicos en el campo de batalla.

Francia basa su escudo de disuasión en una combinación de aviones capaces de lanzar misiles nucleares y submarinos equipados con armas atómicas. El país cuenta con cuatro submarinos de la clase Triomphant, con la seguridad de que uno siempre estará en el mar para garantizar una respuesta inmediata en caso de ataque. Por otro lado, cuenta con 40 aviones que tienen la capacidad de transportar misiles nucleares ASMP, con un alcance de entre 300 y 500 kilómetros.

Por su parte, Reino Unido depende del programa Trident, que incluye cuatro submarinos equipados con misiles balísticos. Uno de estos submarinos está siempre en operación, asegurando la capacidad de respuesta nuclear británica en todo momento. Aunque los misiles Trident son de fabricación estadounidense, una vez cargados en los submarinos, pasan a estar bajo control británico.

La idea de Macron no es nueva, pero cobra especial relevancia en un momento en el que la relación transatlántica parece más frágil que nunca. La posibilidad de que Estados Unidos, bajo un liderazgo como el de Trump, decida restringir el acceso de Reino Unido a los misiles Trident ha llevado a algunos expertos a plantear la necesidad de que Europa refuerce su autonomía en materia de defensa. En este escenario, la propuesta de Macron podría ser un paso hacia una Europa más segura y autónoma, pero también un motivo de tensión con Rusia, que ya ha dejado claro que no va a quedarse de brazos cruzados.