UNICEF denuncia varios disparos a uno de sus camiones en un control militar israelí en Gaza

UNICEF, la agencia de Naciones Unidas para la infancia, ha denunciado un ataque armado a uno de sus camiones en un control militar israelí en Gaza, que no dejó ningún trabajador herido. 

El incidente tuvo lugar el miércoles y lo ha confirmado una de las portavoces de la entidad, Tess Ingram. Además, añade otro portavoz de la agencia, un segundo vehículo que transportaba combustible y formaba parte de un convoy del Programa Mundial de Alimentos también recibió un impacto.

Los disparos tuvieron lugar mientras el vehículo esperaba para cruzar el control israelí en el punto de espera designado para los convoyes de la ONU que viajan al norte del enclave, cerca del control militar de Wadi Gaza. El suceso llega apenas una semana después de que otro ataque israelí matase "por error" a siete trabajadores de la oenegé World Central Kitchen.

Esta vez, explica la portavoz de UNICEF, tres balas impactaron contra su automóvil: dos lo hicieron contra una puerta y una tercera contra el capó; todas ellas provenientes del control militar israelí. Dichos disparos, prosigue Ingram, parecía dirigirse contra un grupo de civiles que estaban en la zona del convoy, y que huyeron tras el incidente. 

Israel por el momento no se ha pronunciado al respecto, ni de forma pública ni en respuesta a la propia ONU, reconoce EFE, que tampoco ha obtenido respuesta de cargos hebreos.

"Era un vehículo blindado, estaba claramente identificado como un vehículo de la ONU, y estábamos en una zona donde se nos había dicho que esperásemos", ha explicado este jueves a EFE la portavoz de la organización, que estaba en el interior del camión cuando fue alcanzado por los disparos.

"Esto no debería ocurrir de ninguna manera. Tuvimos mucha suerte de que todo el mundo estuviera a salvo y no sufriera daños", ha rematado Tess Ingram.

El vehículo formaba parte de una misión conjunta de Unicef y la UNRWA, la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, que transportaba alimentos, medicinas y combustible para alimentar los sistemas de saneamiento y agua corriente en Jabalia, en el norte de la Franja.

Tras el incidente, los trabajadores humanitarios decidieron que querían continuar con la misión, pero les fue imposible, ya que el Ejército los mantuvo esperando en el control durante más de dos horas, y finalmente tuvieron que regresar a Rafah. El grupo tratará de finalizar la misión durante este fin de semana. "El mayor problema es que los niños no han recibido los alimentos ni el combustible para tener agua limpia", apunta Ingram.

En otro mensaje, uno de los portavoces de Unicef en Nueva York, Ricardo Pires, dijo que se trata del incidente más serio que han sufrido los trabajadores de la agencia durante la guerra en Gaza. Pires ha detallado que en el convoy viajaban tres trabajadores internacionales de Unicef junto a dos trabajadores palestinos, además de dos trabajadores internacionales de la UNRWA y uno palestino, y un trabajador internacional del Servicio de Acción contra Minas de la ONU (UNMAS).

"Por desgracia, este no es un incidente aislado para los trabajadores humanitarios en Gaza", dijo Pires, que destacó que el organismo es totalmente incapaz de proporcionar ayuda al nivel necesario en el enclave mientras prosigan los bombardeos y no haya garantías de seguridad para sus trabajadores