Los Bombers, con más de 460 efectivos, han tratado toda la noche de estabilizar el incendio en el Baix Ebre, pero el viento no ha dado tregua y solo se ha definido el perímetro, de 44 kilómetros. Esta mañana se ha levantado el confinamiento domiciliario en todas las localidades excepto Paüls, donde se originó el fuego el lunes.