La narrativa de Rusia empieza a perder fuerza mientras Ucrania continúa recuperando territorio
Dos versiones completamente distintas.
Con los últimos avances del ejército ucraniano, la narrativa de Rusia se debilita. Según informa el medio de comunicación Al Jazeera, Kiev recupera progresivamente el control de casi toda la ciudad de Kupiansk, al norte de Ucrania, pero también el de Pokrovsk, al este.
Toda la situación cambió el pasado lunes para Rusia. Las fuerzas ucranianas aseguraron entonces que impidieron la entrada de refuerzos a la ciudad a través de un gasoducto, una táctica muy común en el ejército ruso. Asimismo, han informado que en ese enclave, el enemigo solo está abastecido de drones.
No obstante, el Ministerio de Defensa ruso insistió, en un comunicado recogido por el diario, que tenía "el control de la situación". "Las unidades del Grupo de Fuerzas Zapad ejercen un control fiable sobre todos los distritos del Kupiansk liberado", Asimismo, aseguraron que los esfuerzos de las fuerzas ucranianas estaban siendo "reprimidos".
Dos versiones completamente distintas. Fue el miércoles cuando, en unas declaraciones consultadas por el periódico, el general Oleksander Syrskyi, comandante del Ejército ucraniano, informó que sus fuerzas habían recuperado el 90% de Kupiansk. Al mismo tiempo, el ministro de Defensa ruso, Andréi Beloúsov, informaba que Ucrania no estaba teniendo éxito en sus esfuerzos por recuperar territorio.
"El ministro ruso sigue mintiendo diciendo que Rusia controla Kupiansk", escribió Andrii Kovalenko, director del Centro Ucraniano para la Lucha contra la Desinformación, en una publicación de Telegram. "En realidad, la mayor parte de la ciudad está controlada por las Fuerzas de Defensa Ucranianas, que continúan despejando la ciudad de los rusos. Sin embargo, todos los funcionarios de Putin siguen mintiendo en presencia del propio Putin", agregó.
Segundo punto de controversia
El segundo punto de controversia fue el "exitosos" ataque a un submarino ruso en las aguas del mar Negro, que protagonizó una enorme explosión. Pero, como era de esperar, el Ministerio de Defensa ruso ha desmentido el ataque. "Ni un solo barco o submarino, así como las tripulaciones de la Flota del Mar Negro estacionadas en la bahía de la base naval de Novorossiysk, resultaron dañados como resultado del sabotaje".
El ministerio ruso publicó imágenes de lo que dijo que era el submarino atacado, en las que parecía intacto sobre la superficie, pero el vídeo no mostraba la sección de popa.
A pesar de los esfuerzos por encontrar una pronta paz en Ucrania, según el medio de comunicación, Rusia planea mantener sus ataques el año que está por entrar. "La tarea clave para el próximo año es mantener y acelerar el ritmo de la ofensiva", aseguró Belousov en presencia de Putin el pasado miércoles.
Putin, por su parte, mantiene su discurso. "No fuimos nosotros quienes empezamos la guerra en 2022; fueron las fuerzas destructivas en Ucrania, con el apoyo de Occidente, los que desataron esta guerra". "Los objetivos de la operación militar especial se lograrán sin duda" y "Rusia logrará la liberación de sus tierras históricas por medios militares", concluyó.