La ruta comercial Bruselas-Washington se (a)grava por Trump: qué es lo que más exporta la UE a EEUU
El presidente estadounidense ha anunciado la imposición, a partir del próximo 1 de agosto, de aranceles del 30% para todos los productos de la UE.

Y al enésimo día, llegó la respuesta. Donald Trump ha anunciado este sábado la imposición, a partir del próximo 1 de agosto, de aranceles del 30% para todos los productos de la Unión Europea (UE). El presidente de Estados Unidos lo ha comunicado en una carta dirigida a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que ha difundido este sábado en su red social Truth Social.
Después de amenazar con un 20% desde el 'Día de la Liberación' y tras un constante tira y afloja con pausas, advertencias y rumores, Trump ha movido ficha. "A partir del 1 de agosto de 2025, cobraremos a la Unión Europea un arancel de solo el 30% sobre los productos de la UE enviados a Estados Unidos, independiente de todos los aranceles sectoriales", ha publicado.
Ante este paso, la presidenta de la Comisión Europea ha respondido asegurando que Bruselas sigue dispuesta a continuar con las negociaciones arancelarias con EEUU para lograr un acuerdo antes del 1 de agosto, pero no descarta contramedidas "proporcionadas" para "salvaguardar" los intereses europeos.
Tanto para EEUU como para la UE es imperativo cerrar un pacto que evite gravámenes aún más altos, no en vano la ruta comercial Bruselas-Washington es la primera para los Veintisiete en cuanto al intercambio de bienes.
Según datos de Eurostat correspondientes a 2024, Estados Unidos es el principal país receptor de bienes 'comunitarios', con un 20'6% del total y el segundo en cuanto al montante de importaciones, con un 13'7% y sólo superado por el 21'3% de China. Eso, no hace falta ni decirlo, son muchos miles de millones en liza, que ahora afrontan una época de incertidumbre. Pero, ¿en qué se traducen todos esos millones?
Con dos gigantes haciendo negocios, la lista de productos con origen Bruselas y destino EEUU es inacabable. Pero en el totum que da forma a los 532.000 millones de euros (532 billones) sólo en 2024 hay algunos sectores especialmente relevantes. Son los casos de la industria farmacéutica, alcohol, semiconductores y aeronáutica. De hecho, la propia UE intentó protegerlos con la exigencia de exenciones específicas en el plan de aranceles que ultimaba hace días la Casa Blanca.
De todos ellos, la farmacología es el gran campo de batalla, entre productos médicos y farmacéuticos. Bruselas envió en 2024 un montante de 119'8 billones de euros, una partida que se ha disparado con respecto a los datos previos a la pandemia. A día de hoy y a la espera de lo que pase con los aranceles, esto representa nada menos que un 22'5% de todo el negocio exportador.
Por detrás, la maquinaria industrial y mecánica engloba una facturación de 90'9 billones de euros (un 17'1%), seguido de la automoción y la industria del transporte, cuya suma alcanza los 70 billones (13'2%). En cuarto lugar aparece la industria electrónica y eléctrica (45'5 billones en 2024, para un 8'5% del cómputo global). Entre las cuatro categorías concentran el 61'3% de los 532 billones alcanzandos el pasado año.
Por importancia, los siguientes conglomerados son comida y bebida, un negocio que supuso en 2024 25'8 millones de euros para la UE, el metal y derivados (24'9), el instrumental científico, y denominado de precisión (22'8), mientras que el campo de la química y derivados llega a los 22'2 billones.
En relación a los países que integran la UE, el gran exportador es Alemania, con un montante de 161.215 millones de euros en 2024, de acuerdo con Eurostat. Irlanda, un país muy vinculado a EEUU por razones migratorias, es el segundo socio comunitario con más peso cuantitativo —72.085— superando a potencias comerciales como Italia —64.759 millones—, Francia —47.064 millones—, Países Bajos —43.430—, Bélgica —32.958 millones— y España, que aparece en séptima posición en la lista interna de la UE con un volumen exportador de 18.179 millones de euros
El caso español es especialmente significativo porque, a cierre de 2024, era de los pocos miembros de la UE con déficit comercial en exportaciones/importaciones con EEUU, alcanzando un resultado de -5.981 millones según la estadística oficial europea. Únicamente Países Bajos está más abajo, con un déficit disparado de 24.736 millones de euros.
Del otro lado, Bruselas también se nutre de los productos made in USA, y más aún desde el giro copernicano que supuso la invasión rusa de Ucrania. Aprobadas las múltiples sanciones al régimen de Putin, la UE se vio obligada a buscar nuevos mercados —o a reforzar notablemente el suministro— en petróleo y gas, entre ellos el americano. De ahí nace el principal producto con origen EEUU, los aceites de petróleo, seguidos de medicinas y fármacos y un tercer sector, el de los motores y piezas de vehículos no eléctricos.
