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Lo que se coló en la ONU entre Gaza y Ucrania... ¿te acuerdas del Sáhara? Marruecos sí

Lo que se coló en la ONU entre Gaza y Ucrania... ¿te acuerdas del Sáhara? Marruecos sí

Mientras buena parte de la comunidad internacional centra sus esfuerzos diplomáticos en detener el "genocidio" israelí o la invasión rusa en territorio ucraniano, la Asamblea General ha vuelto a ser testigo de otro viejo conflicto enquistado, en el que Rabat ha sacado a relucir sus dos términos favoritos. "Solución" y "realista".

Aziz Akhannouch, primer ministro del Reino de Marruecos, durante su intervención en la 80º edición de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Aziz Akhannouch, primer ministro del Reino de Marruecos, durante su intervención en la 80º edición de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU).UN Photo/Laura Jarriel

La 80º Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas. El escenario de mayor nivel a escala internacional donde se dirimen los principales conflictos y guerras que mantienen al mundo en vilo. Los focos mediáticos alumbran con fuerza a dos de ellos. El "genocidio" -según una agencia independiente de la ONU- o masacre -cuestión meramente visible- que perpetra Israel en la Franja de Gaza, sin perjuicio de otras atrocidades en la Cisjordania ocupada. Pero también la invasión rusa sobre Ucrania, una picadora de carne humana que no ha dejado de funcionar desde febrero de 2022.

Pero se ha colado otro en medio de esos dos conflictos, y de las distintas intervenciones de líderes políticos que van desde reconocimientos oficiales del Estado palestino a giros radicales en las posibilidades de que Kiev derrote al gran oso y a los esfuerzos desmedidos del mayor ejército postsoviético. Un conflicto cuya situación de enquiste en el tiempo quedó retratado por lo que escasamente que ha trascendido este miércoles en España. ¿Se acuerdan del Sáhara Occidental? Pues Marruecos sí.

Rabat se encargó de remarcar las posiciones que ha venido trabajando más de una década a golpe de firma y diplomacia -y de firma en chequera en acuerdos comerciales-. Lo hizo a través de la intervención del primer ministro del Gobierno marroquí, el multimillonario Aziz Ajanuch, que no ha desaprovechado el atril de la Asamblea General para recordarle al secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, y al enviado especial para el conflicto del Sáhara Occidental, Staffan de Mistura, que no hace falta buscar más soluciones, puesto que Marruecos tiene la "definitiva al conflicto regional del Sáhara".

Una 'solución' marroquí con muchos adjetivos: "realista", "duradera", "pragmática"...

En este sentido, el político marroquí ha defendido a ultranza la que es la única postura que Marruecos permite desde que la planteó el actual monarca, Mohammed VI, ya en 2007. De nuevo, han utilizado toda la batería de adjetivos que acostumbra a acompañar la defensa de un plan que ha sido formulado unilateralmente por Rabat y que supone que los saharauis renuncien para siempre a la independencia. O en otras palabras, a la soberanía que es reconocida por la propia ONU -la última resolución fue la del 31 de octubre de 2024 (S/RES/2756)- apostando por la realización de un referéndum de autodeterminación.

"La iniciativa de autonomía es la única solución realista. Goza de un creciente apoyo a nivel internacional como parte de la dinámica impulsada", ha señalado Ajanuch, que tampoco ha escatimado en adjetivos en sus siguientes afirmaciones. "El mundo es testigo de que la cuestión del Sáhara marroquí se encuentra en una encrucijada histórica", ha expuesto, apuntando a que "la mayoría de los Estados miembros de esta organización abren el camino hacia una vía clara que indica que ya es hora de pasar página en este conflicto, respetando plenamente la soberanía de Marruecos y su integridad territorial".

El primer ministro marroquí se refiere a un proceso en el que en los últimos años, Marruecos ha logrado que se sumen a este plan no solo países tradicionalmente alineados con la causa saharaui y con Argelia como ha ocurrido con España y Francia. También lo consiguió con EEUU, durante el primer mandato de la Administración Trump, en el que se suscribieron acuerdos multimillonarios de armamento con Washington. Y lo consiguió incluso con Israel, después del histórico pacto por el que se sumaron a los Acuerdos de Abraham, impulsados por Trump, que supusieron el acercamiento histórico entre Rabat y Tel Aviv (y dejaron protestas masivas en las calles, claro). 

"El Sáhara se ha convertido en una tierra llena de oportunidades gracias al modelo de desarrollo impulsado por Marruecos", ha dicho el mandatario marroquí, destinando los últimos minutos de su alocución al Sáhara Occidente, pero sin mencionar, por ejemplo, que la justicia europea ha condenado el expolio marroquí de los productos saharauis. "Y es por ello que esta región se ha convertido en una plataforma estratégica que contribuye a la paz, la estabilidad y el desarrollo colectivo", ha asegurado.

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Soy redactor de actualidad en El HuffPost, donde cada día realizo un seguimiento de todo lo que está pasando y marcando la jornada, con el único objetivo y árdua tarea de trasmitírselo a nuestros lectores de una forma en la que conozcan el contexto y el trasfondo más allá de un mero titular. Es decir, para que tu cuñado no pueda colártela otra vez.

 

Sobre qué temas escribo

Aunque en el día a día acabe escribiendo de cualquier cosa que suceda en el mundo, “puede que me recuerdes” de algunas temáticas que suelen quitarme el sueño con especial frecuencia. Me gusta escribir de política internacional, sobre todo cuando esta es eufemismo de atroces injusticias contra los derechos humanos o el medio ambiente, así como para acercar causas sociales que pasarían inadvertidas (la siguiente podría ser la tuya, así que escríbeme). La morriña también me devuelve en ocasiones a Galicia, sobre todo para que sus historias no se pierdan en el camino a la meseta.

 

Mi trayectoria

Antes de llegar a El HuffPost en 2021, fui periodista en La Voz de Galicia durante cinco años. En aquella etapa también pasé por los micrófonos de ‘Radio Voz’, en distintos programas radiofónicos. Y, aunque parezca poco probable, bebía más café que en la actualidad.


Soy de Ribeira, una bella localidad coruñesa que probablemente recuerdes del marisco, las páginas de sucesos o de personalidades de las que solemos presumir (tenemos a la triplista olímpica Ana Peleteiro y a una de las Tanxugueiras).


Aunque bromeo con que soy doctorado en Periodismo Gonzo, en realidad solo soy licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid (UCM), pero, eso sí, tengo la orla de la misma tienda que la que se la hizo al rey Felipe VI. Aquellos años en Madrid me sirvieron para conocer la ciudad, pero también para entender que el mercado de la vivienda aún podía ir a peor. Ah, también tengo otra identidad secreta bajo la que hago rap o escribo poesía y que solo revelé en la redacción para que me dejasen entrevistar a artistas.

 


 

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