Trump, bajo mínimos: su popularidad se hunde entre escándalos (más allá del 'caso Epstein')
La última encuesta de Reuters-Ipsos marca su hundimiento en cuanto a aprobación popular en EEUU, rodeado por las sombras en torno a su relación con el pedófilo Jeffrey Epstein y otros problemas del día a día en el país.

Trump está bajo mínimos... al menos en aprobación popular. La última encuesta periódica de Reuters e Ipsos marca el hundimiento del presidente de EEUU en cuanto a la validación que le da la sociedad de su país. Cerca ya de cumplir un año en su segunda etapa en la Casa Blanca, su índice de popularidad se hunde, golpeado por las sombras de su relación con Jeffrey Epstein y otros problemas del día a día en los States.
Poco amigo de las encuestas que no le van bien, esta entrega da al 47º presidente de EEUU donde más le duele. En su 'aura' de líder respaldado por su pueblo. No es el caso, como demuestra el estudio sociológico. Pero no es un problema exclusivo del votante contrario a Trump, incluso entre sus 'republicanos', el descontento crece.
La muestra de Reuters e Ipsos conocida este miércoles 19 de noviembre sitúa la aprobación popular de Donald Trump en su punto más bajo. Un 38%, nueve puntos menos que el dato cuando tomó posesión el 20 de enero. Entonces, un 47% de la sociedad reconocía confiar en él tras su incontestable triunfo electoral.
Pero hay más, porque la brecha se agranda con el porcentaje de descontento social. Hoy por hoy, con la encuesta realizada en los últimos días, la desaprobación llega al 60% cuando en su toma de posesión se quedaba en el 41%, diecinueve puntos porcentuales menos.
De camino a un record... que ya es suyo
El bajón aún no alcanza visos de histórico, ya que Trump cuenta con su propio récord. En la entrega periódica de Reuters e Ipsos, el líder republicano llegó a caer hasta el 33% de aprobación al comienzo de su primer mandato y lo cerró con un pírrico 34%.
Ni siquiera en la peor etapa de Joe Biden el demócrata llegó tan abajo. Al cierre de su mandato, marcado por sus confusiones mentales, lapsus verbales y conocida ya su retirada de la carrera electoral, el porcentaje de aprobación se quedó en el 35%, veinticuatro puntos menos que su techo inicial, un 59%. Cifra que Trump nunca ha podido alcanzar al menos en las 'votaciones demoscópicas'.
En noviembre de 2025, evidentemente Trump sigue mandando en el Partido Republicano, aunque su poder absoluto ya no lo es tanto. La cifra de apoyos internos también ha caído. De forma pública han surgido parlamentarios que han desafiado sus políticas en el 'caso Epstein' o en cuestiones de demografía y gestión social. Contra todos ellos ya ha prometido medidas 'disuasorias' y ha lanzado pomposos insultos en sus redes.
Ni los suyos le creen sobre Epstein
A nivel anónimo las voces críticas también crecen. En las últimas semanas, el apoyo social conservador ha caido del 87 al 82%. Los suyos tampoco le respaldan en la gestión del 'caso Epstein', especialmente tras las críticas surgidas en la Cámara de Representantes, con la ex-MAGA Marjorie Taylor Greene como principal adalid de la 'transparencia'.
Según los datos de Reuters e Ipsos, solo el 20% de los estadounidenses —entre ellos un 44% de los republicanos— avala cómo está tratando el tema. Para la inmensa mayoría, tanto el Gobierno como el propio presidente ocultan información de la relación de Trump con el pedófilo y delincuente sexual muerto.
Los problemas reales del día a día
Si nos adentramos a las temáticas del estudio demoscópico de Reuters e Ipsos, Trump no aprueba ninguna categoría y en todas ha bajado sus datos. Ocurre en política migratoria, que comenzó con 7 puntos de 'apoyo' y ya va por 10 de desaprobación.
A nivel económico es más sangrante, pasa de un 6% positivo el día de su toma de posesión a un 24% negativo hoy... y si hablamos de coste de la vida para los ciudadanos, el hundimiento es aún más estridente. El punto de partida ya era malo (-6%), pero ha caído en picado hasta el -39%.
Todo ello deja a Trump en una media negativa de un 22% de diferencia entre aprobación y desaprobación a nivel general de su mandato y con un primer revés electoral vivido hace escasas semanas.
