Las Termas de Saturnia: el paraíso de las aguas termales, gratis y al lado de tres de los pueblos más bonitos de Italia

Las Termas de Saturnia: el paraíso de las aguas termales, gratis y al lado de tres de los pueblos más bonitos de Italia

Además, se encuentran a poco más de dos horas de coche de Roma.

Imagen de Las Termas de Saturnia (Italia)Raimond Spekking / CC BY-SA 4.0 (a través de Wikimedia Commons)

Lugares idílicos para viajar hay muchos. Pero unos son más conocidos que otros. Uno de esos ‘tesoros escondidos’ se encuentra en Italia. Se trata de Las Termas de Saturnia, un grupo de manantiales situados en el municipio de Manciano, a pocos kilómetros de la localidad de Saturnia.

Además, también se encuentra cerca de Roma, a apenas dos horas en coche, por lo que es una excursión que se puede combinar con un viaje a la capital italiana.

Las Termas de Saturnia están situadas en la región de la Toscana, y el agua que emana del interior de la tierra es caliente al encontrarse en una zona volcánica. De hecho, desde las propias termas se puede observar el monte Amiata, un volcán que ya están extinto y que registró un gran proceso eruptivo hace unos 300.000 años.

El acceso a este ‘paraíso de las aguas termales’ es gratuito y cuenta en su complejo con baños, duchas y hasta secador para poder cambiarse y asearse, tal y como muestra en uno de sus vídeos la tiktoker Judith Tiral.

Tres pueblos de visita obligada junto a las termas

Por si el entorno de Las Termas de Saturnia fuera poco, a solo cinco minutos en coche se encuentran hasta tres de los pueblos que están considerados como más bonitos de Italia.

El primero de ellos es Montemerano, una localidad medieval construida en la parte más alta de una colina. Su centro histórico esta conformado por una muralla, casas construidas en piedra y varias fortalezas y torres que datan de la Edad Media y el Renacimiento.

Otro de los municipios a visitar es Pitigliano, conocido popularmente como ‘la pequeña Jerusalén’ debido a la presencia histórica de una comunidad judía. Desde la carretera se puede contemplar una ciudad que, por cómo están dispuestas sus casas (que sobresalen de un gran macizo de toba volcánica) “parece estar tallada en una piedra”, narra Judith Tiral.

El tercer y último pueblo a visitar en la zona es Sovana, conocido por ser un importante centro etrusco, burgo medieval y renacentista, y sede episcopal.