La solución de la Xunta al problema de vivienda es reconvertir bajos comerciales en pisos
"Hay que ser prácticos". El popular Alfonso Rueda presenta su proyecto piloto para comprar, rehabilitar y destinar a alquileres sociales este tipo de inmuebles, puesto que antes tenían un alto valor, pero ahora "degradan las ciudades". Desde el BNG lo rechazan y proponen recetas en la dirección contraria.

La misma Xunta de Galicia que trata de obstaculizar a toda costa que el Ayuntamiento de la capital gallega, Santiago de Compostela, pueda hacer uso de la Ley Estatal de Vivienda y completar la elaboración de las zonas tensionadas para intervenir el mercado del alquiler ha anunciado que cuenta con un proyecto piloto para atajar el problema de la vivienda. Una idea que parte de la premisa de que el Gobierno gallego adquiera viviendas, las rehabilite y las destine a alquileres sociales. Pero hay un pequeño detalle.
El popular Alfonso Rueda -el sucesor de Feijóo en la Xunta tras su desembarco en Madrid- no ha planteado esta medida en Galicia. Lo ha hecho en Madrid, en el marco de su intervención en uno de los desayunos informativos que organiza Nueva Economía Fórum. Ha descrito como una "solución" al problema de la vivienda su plan para comprar bajos comerciales para que sean futuras viviendas.
En este sentido, Rueda no ha apostado por un ámbito o territorio político desconocido. La Xunta ya había venido legislando en ese sentido, al igual que se ha hecho en otras comunidades como la madrileña, a través de reformas de la normativa sobre la habitabilidad.
Rueda: "Hay que ser prácticos"
En esta línea, y aunque desde que comenzó la tendencia de rehabilitación de bajo comerciales para obtener la cédula de habitabilidad y correspondiente licencia de vivienda distintas voces han alertado del peligro para los barrios de acabar con los bajos comerciales, Rueda ha hablado de que el sistema de comercio y los hábitos han cambiado. Sin profundizar en las causas de un proceso acelerado por la pandemia y por el inexorable avance del comercio en línea, el mandatario gallego ha descrito un escenario en el que antes eran propiedades de un alto valor y ahora "degradan las ciudades, especialmente los centros".
Así es cómo ha defendido que es necesario que la Xunta dé "facilidades" para que "puedan vivir aquí". También ha esgrimido que esta es una dinámica que se está realizando en distintos países europeos y que toca pragmatismo: "Por lo tanto, hay que ser práctico, y lo que se hace en muchos sitios de Europa, ¿por qué no se puede hacer aquí?".
La Xunta maneja otras "medidas"... como más reducciones fiscales
Como un aperitivo antes de dar a conocer las líneas maestras de los presupuestos gallegos de 2026, Rueda ha subrayado que esta es solo una de las varias medidas que tienen planeadas, defendiendo a aquellos gallegos y gallegas que no pueden empezar un proyecto vital emancipados sin condiciones "muy precarias". No ha profundizado tampoco en adjetivos para definir las condiciones viviendo en lo que antes era un bajo comercial.
"No podemos resignarnos a que la vivienda sea un artículo de lujo más allá de lo razonable para hacerla inalcanzable. No podemos mirar hacia otro lado cuando muchísima gente que se ha de emanciparse, empezar una nueva vida y no puede, o tiene que hacerlo en condiciones de habilidad muy precarias", ha expuesto el presidente de la Xunta de Galicia, antes de ponerse a hablar de nuevas reducciones fiscales.
Rueda ha defendido nuevas rebajas fiscales para "ayudar a la gente a que tenga dinero para tener vivienda y no para pagarle impuestos a las administraciones". Por ello ahondarán en una reducción del impuesto de transmisiones patrimoniales y, mientras cargaba contra el Gobierno central, ha indicado que las familias monoparentales tendrán una rebaja del 5% en el impuesto de transmisiones patrimoniales.
Alexandra Fernández (BNG): "El PP apuesta por un modelo de ciudad obsoleto"
Desde la formación que lidera la oposición gallega en O Hórreo, el Bloque Nacionalista Galego (BNG), consideran que esta es una estrategia equivocada. "El PP apuesta por un modelo de ciudad obsoleto", explica a El HuffPost Alexandra Fernández, diputada en dicho Parlamento gallego y responsable del área de Vivenda en la organización. "Los bajos comerciales son una parte fundamental del barrio de la ciudad", indica, señalando que "esa planta a nivel de ras de suelo tiene que ser un catalizador económico y social". Es decir, la apuesta debe ser la contraria, trabajar en la dirección de que puedan volver a tener actividad económica.
Fernández considera que "no tiene sentido seguir con la fijación de modificar los usos comerciales cuando en este país sí hay vivienda" y para ello aporta datos. Hemos pasado de 300.000 viviendas vacías a medio millón", expone, destacando que "90.000" de ellas están en las grandes siete ciudades gallegas. La diputada del Bloque apunta a que "no tenemos un problema de stock, tenemos un problema de accesibilidad [a la vivienda]" y que durante los pasados 16 años de ejecutivos populares no se construyó vivienda pública acorde a las necesidades.
En esa línea, la receta que defienden desde la formación es la misma que han venido defendiendo desde el pasado. "Teniendo la posibilidad de comprar viviendas donde los estándares de calidad son mayores, no entendemos que la apuesta sea vivir a ras de suelo", explica, aludiendo a una "peor calidad arquitectónica" de espacios que no fueron planificados en su construcción como vivienda. Desde el BNG apuestan por adquirir viviendas para alquileres sociales, pero con el actual parque existente y actuando desde cuestiones básicas, como el ejercer el derecho de tanteo cuando se vende una vivienda que finaliza plazo de protección social -hay 58.000 que lo harán en los próximos años-.
Alexandra Fernández recuerda que acaban de registrar una iniciativa de adquisición pública de viviendas e instan a la Xunta a estar preparadas ante el inminente nuevo plan estatal de Vivienda. "Creemos que tienen que estar preparados y tomar medidas para contar con todas las herramientas", argumenta, apostando por la creación de "un instrumento jurídico de tanteo en favor de aquellas administraciones públicas donde exista demanda de vivienda" con el objetivo de "poder optar a comprarla si es a un buen precio". Para garantizar lo último, el BNG apuesta por crear "una comisión técnica especializada en adquirir vivienda", es decir, al igual que de cara a planificar la construcción, que también haya un equipo especializado de profesionales en esta materia.
