Ryanair e Italia van a la guerra

Ryanair e Italia van a la guerra 

El Gobierno italiano ha probado una norma para limitar las subidas de precios de los billetes de avión a las islas de Sicilia y Cerdeña.

Avión de Ryanair, en una imagen de archivo.Getty Images

Ryanair baraja frenar su expansión en Italia y aumentar los vuelos desde países como España y Portugal después de que el Gobierno italiano haya aprobado una norma para limitar las subidas de precios de los billetes de avión a las islas de Sicilia y Cerdeña (sur).

La nueva norma, promulgada por decreto el pasado lunes, ha obligado al consejero delegado de Ryanair, Eddie Wilson, a viajar a Roma para reunirse con el ministro de Empresa, Adolfo Urso, y mostrar su disconformidad, ya que considera que viola la normativa europea.

"Es ilegítimo e ilógico. Si sigue así, en lugar de abrir una nueva ruta desde cualquier ciudad italiana a Catania (Sicilia), volaremos más a España. ¿Sabes dónde están vitoreando el decreto? En Malta, en Chipre, en Canarias... volaremos más allí, en lugar de estar presos en Italia", afirmó Wilson en declaraciones recogidas por el diario La Repubblica.

El directivo admitió que en el último año han subido el coste de los billetes de avión, pero atribuyó los aumentos a la mayor demanda tras la pandemia y las tasas que cobran los aeropuertos, al tiempo que negó tajantemente que se guíen por un algoritmo informático para fijar los precios.

"Es una teoría de la conspiración basada en la fantasía de las personas que no tienen suficiente trabajo que hacer", subrayó.

Wilson también acusó al Ejecutivo liderado por la ultraderechista Giorgia Meloni de promover una fijación de precios más propia de la "Unión Soviética" en 1917" que tendrá un efecto contrario en el mercado.

"Incluso en la escuela de Harry Potter han entendido que es necesario aumentar la oferta de un producto para que los precios bajen", ironizó tras señalar que con la llegada de los operadores de bajo coste se ha reducido el coste de viajar en territorios que hasta entonces dependían de una sola compañía.

Según el texto distribuido por el Ejecutivo, la norma prohíbe los algoritmos que aumentan los precios de las rutas nacionales hacia y desde las islas durante los periodos de máxima demanda, como el vinculado a la estacionalidad o a un estado de emergencia, y si el precio del billete es un 200% superior a la tarifa media del vuelo.

También se considera una "práctica comercial desleal" el uso de procedimientos automatizados para determinar las tarifas, basándose en la elaboración de perfiles web de usuario o en el tipo de dispositivos electrónicos utilizados para las reservas cuando provoque un perjuicio económico.

La medida ha sido muy criticada por las compañías aéreas porque crea "un peligroso precedente para un sector cuya liberalización ha reportado enormes beneficios a los ciudadanos italianos y europeos en los últimos años", de acuerdo con el presidente de la Asociación Italiana de Compañías Aéreas de Bajo Coste (Aicalf), Alessandro Fonti.