"Hubo una época en la que no se podía hablar mal [de Israel]", añora o lamenta el presidente de EEUU, apuntando a una pérdida de poder del Estado judío como 'lobby'. En plena campaña para el Nobel de la Paz, el republicano advierte: "Puede que estén ganando la guerra, pero no están ganando en el mundo de las relaciones públicas". Y quizás le salpique a él.
Más de 350.000 personas han acudido a las manifestaciones, según ha estimado el Foro de Familiares de Rehenes y Desaparecidos, que insiste en su mensaje a Netanyahu: el Gobierno debe firmar el acuerdo que está sobre la mesa".
Países aliados de Israel, la UE, la ONU y ONG de referencia condenan el ataque: primero se golpeó el centro médico y luego, a los sanitarios que acudieron a ayudar y a los informadores que trataban de contar lo ocurrido.
Eyal Zamir confirma que han cumplido con todos los objetivos de la operación para tomar por la fuerza Ciudad de Gaza, a pesar de seguir mostrándose en contra por el peligro para los rehenes. Descarga esa responsabilidad en el primer ministro: "Ahora está en manos de Netanyahu".
En las últimas semanas, el Gobierno israelí ha aprobado importantes decisiones que suponen un antes y un después, traspasando líneas rojas del derecho internacional con las que no se había atrevido antes. ¿Qué está cambiando?
El jefe del Estado Mayor avisa que la nueva ofensiva contra la ciudad de Gaza es "inminente". La marcha concluye con enfrentamientos contra la Policía ante la sede del Likud, el partido del primer ministro.
Israel se prepara para tomar el pleno control de la franja palestina, mientras la ayuda humanitaria entra a cuentagotas, forzada por las imágenes del hambre. Más allá de la inanición y las bombas, para los menores su tierra es un cementerio de sueños.
De madrugada, el Gabinete de Seguridad daba luz verde al plan de Netanyahu para conquistar Ciudad de Gaza y completar su dominio en la Franja. El ejército no lo ve bien, el mundo tampoco... ni siquiera su pueblo lo apoya. Sin entender el por qué, ahora se teme el cuándo y el cómo.
Alemania ha dado, este viernes, paso a un histórico embargo de armas a Israel. Otros países avanzan en sus reprimendas a Tel Aviv, a la espera de que Netanyahu inicie oficialmente la fase de "conquista total".
La decisión, anunciada por el canciller federal, el conservador Fiedrich Merz, llega en respuesta al plan de Netanyahu para ocupar militarmente la Franja, contraviniendo una vez más el derecho internacional y con el rechazo hasta de su ejército.
Según una encuesta del diario 'Maariv' realizada hace dos días, conociendo ya la intención del primer ministro de hacerse con el control del enclave palestino.
El Ejército insiste en que "todos los rehenes vivos morirán" con la incursión, mientras que países amigos avisan de lo equivocado de agravar la situación humanitaria.
Este jueves, el primer ministro de Israel afronta una reunión de su Gabinete para decidir el futuro de la Franja y de la guerra. Horas antes, ha explicado sus intenciones en una entrevista a Fox News y posteriormente con prensa israelí. Hamás promete que Israel "pagará un alto precio".
Netanyahu ha pospuesto a los próximos días la reunión del Gabinete de Seguridad en la que se debían decidir los próximos pasos para la franja palestina.