Quiere que los pasajeros tengan derecho a embarcar "un objeto personal como un bolso, mochila u ordenador portátil de hasta 40x30x15 centímetros y una pieza pequeña de mano de hasta 100 centímetros y 7 kilos, sin coste adicional".
El acuerdo ha salido adelante pese a los votos expresados en contra por los representantes de España, Alemania, Portugal y Eslovenia, que han avisado de que esta decisión supone un "retroceso".