La discusión se instala en el PP: ¿qué hacer con Vox?

La discusión se instala en el PP: ¿qué hacer con Vox?

La ultraderecha 'rompe' con los de Feijóo, aunque respetando los gobiernos de coalición en municipios y autonomías. Los 'populares' lo ven como un "teatro".

Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal, el pasado Día de la HispanidadEuropa Press via Getty Images

La ultraderecha rompe con el PP sin romper con el PP. El secretario general de Vox, Ignacio Garriga, ha anunciado este lunes en rueda de prensa que su formación se desmarcará a partir de ahora del partido de Alberto Núñez Feijóo. 

¿La razón? La ausencia de colaboración para armar una estrategia conjunta contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la amnistía. La extrema derecha denuncia "ataques y desprecios" por parte del PP, al que lleva semanas reclamando una acción coordinada y menos 'tibieza' a la hora de combatir al Ejecutivo de coalición. 

Los de Abascal quieren marcarle el paso al PP al exigirle que utilice su mayoría absoluta en el Senado para impedir la tramitación de la ley de amnistía, algo a lo que los de Feijóo se niegan, así como a emprender acciones comunes con Vox. 

Todas estas razones han hecho que Garriga anunciara que Vox rompía con el PP a nivel nacional, aunque sin tocar una coma de los acuerdos de coalición en ayuntamientos y comunidades autónomas donde ambos partidos gobiernan juntos. 

Esta especie de "pelea nacional" preocupa lo justo a los barones del PP, tal y como explican a este diario. "Tenemos una relación bastante ordenada, aunque pueda haber diferencias", responden desde regiones como Valencia o Aragón. 

Barones del PP esperan que “la pelea nacional” con Vox no afecte a sus gobiernos: “Nosotros tenemos una relación bastante ordenada, aunque pueda haber diferencias”, dicen en Valencia o en Aragón. “Vox están intentando encontrar su hueco, lo que tenemos que hacer nosotros es pasar, restarle importancia”, analizan. 

La aspiración de todos los dirigentes regionales del partido es la misma: hacerse un Juanma Moreno. Esto es, "aunar poco a poco el voto hasta lograr tener una mayoría suficiente" para gobernar en solitario. Lo cierto es que el andaluz lo hizo sin meter a la ultraderecha en su Gobierno, aunque sí pactando con ella y con Ciudadanos para acceder al Ejecutivo regional. 

Con estos mimbres, en Génova vuelve la discusión interna sobre qué relación mantener con Vox. Un dilema no resuelto por el líder del partido. Hay quien, como Esperanza Aguirre, prefieren normalizar la relación con la extrema derecha. Pero otro sector del partido considera que hay que diferenciarse y volver a la centralidad. El diagnóstico: "están muriendo como murió Ciudadanos". 

Las últimas encuestas, como la de 40dB para la SER y El País, que dan mayoría al PP junto a Vox, refrendan la estrategia de Génova en su respuesta al Gobierno y a la amnistía. "Es el discurso que corresponde con respecto al momento que vivimos”, afirman. Esperan que, con esta línea estratégica, el votante de Vox regrese al PP. 

Mientras tanto, como dice un diputado popular, Vox sigue con su "teatro" haciendo como que rompe con el PP.