La ONG Handicap International constata el daño a infraestructura civil crítica, sistemas de suministro energético y de agua, más servicios educativos y de salud.
Los israelíes que sufrieron a Hamás en el sur del país relatan sus experiencias con un hilo común: el estupor por verse envueltos en un ataque múltiple y desconocido, el horror por la pesadilla y cierto desamparo por no haber tenido protección.
Una cifra brutal que da cuenta del daño en la población cisjordana, donde se concentra la violencia desde hace meses, en especial en su campo de refugiados.
La operación especial sobre Yenín (Cisjordania) que ha acabado con 12 palestinos muertos, tres niños, genera indignación y respuesta también en la Franja.
No, no es Gaza. Lo que están bombardeando las IDF ahora es Cisjordania, un campo de refugiados, que dice Tel Aviv, es un foco de milicias. Es algo no visto en 20 años, desde la Segunda Intifada. La temperatura sube.
La organización habla de "destrucción generalizada", que ha afectado a la población civil, más allá de la supuesta diana en la Yihad Islámica palestina.
El crío y su padre cruzaban en coche, en el momento de un enfrentamiento con colonos. Dos personas murieron en su funeral, por enfrentamientos con el Ejército.
La menor, de 16 años, fue encontrada desangrada por su hermano, tras recibir cuatro impactos. El Ejército israelí ha reconocido que abrió fuego "no intencional" contra ella.
“Los disparos no provinieron de palestinos armados, como inicialmente defendieron las autoridades israelíes”, deja claro, y tilda de "alarmante" que no indaguen las IDF.
El sonido de las balas en las grabaciones ha permitido determinar la distancia a la que se efectuaron los disparos, entre 150 y 180 metros. Ahí lo que había era un blindado.
No está claro si Israel va a o no a investigar el caso, como le han reclamado de la ONU a EEUU, porque entiende que es una “muerte en combate”, aunque era una simple informadora.
Guterres se niega a apuntar a Israel, llama a actuar a las "autoridades competentes", pese a los señalamientos del Ministerio de Salud palestino y la Media Luna Roja.