La vida en la Villa Olímpica, por Jorge Maqueda: "Esos momentos son de lo mejor"

Simplemente estar allí es una de las grandes ilusiones de casi todo deportista. Vivir el deporte desde su propio corazón, en esa "ciudad idílica", como algunos atletas denominan a la Villa Olímpica. Superada la experiencia 'incompleta' de Tokio y sus Juegos del covid, El HuffPost se mete dentro de esta pequeña gran urbe de 52 hectáreas y en un terreno que abarca tres ciudades, Saint-Denis, Saint Ouen y L’Ile Saint-Denis.

Allí responden los mejores enviados especiales posibles: los olímpicos españoles. Cómo llevan el día a día en la habitación, qué tal es la experiencia del 'comedor', en qué se reparte el tiempo libre... Varias preguntas que varios deportistas han querido responder in situ.

Abre fuego Jorge Maqueda advirtiendo que "libre, libre, hay poco tiempo". Pero, pese a esa sucesión de entrenamientos y partidos, el lateral derecho de la selección de balonmano no se resiste a mostrar su ilusión por estar allí. Él es uno de los 'Hispanos' de mayor ascendente y cuenta que el equpo se reparte "en dos apartamentos, de 8 y 6 jugadores".

Dentro, están divididos por habitaciones. Él comparte habitación con su compañero de club en el Nantes Kauldi Odriozola. "Ya estamos hartos el uno del otro", comenta entre risas. Por si acaso matiza de inmediato que "es broma, eh, nos llevamos estupendamente y nos compenetramos bien en esos ratos del día a día que nos quedan".

Fuera de la habitación, el balonmanista de Quero (Toledo), explica que "hacemos mucha vida en común, aunque la exigencia de entrenamientos físicos, sesiones de vídeo y demás nos deja poco tiempo libre". En esos "ratitos", prosigue, "intentamos movernos por la villa, ir al comedor, pero siempre intentando ir en grupo, más que de forma individual".

No en vano, Maqueda presume de ese espíritu de grupo que caracteriza a los 'Hispanos' y les permite ser algo más que un grupo que se junta algunos días al año. Entrelazando reflexiones serias y algún toque de humor, apunta que "todos nos conocemos y tenemos un grupo hecho, si viene alguien nuevo es fácil adaptarse... Somos todos tan majos que cualquiera se adapta fácil (risas), pero ese ambiente también hace que todo el mundo tenga ganas de venir"

"Por ejemplo, decimos de quedar, que si a tomar un café, a dar un paseo... y a lo mejor alguno no puede o no le apetece, pero solemos ir bastantes", comenta uno de los pilares de los Hispanos dentro y fuera del campo a sus 36 años.

Maqueda no escapa a ese gran foco de atracción que es el maremágnum de selfis, saludos y momentos de complicidad con ídolos o amigos de otras disciplinas. "Hombre, eso te motiva, ir andando por aquí y ver a deportistas de todo el mundo, de todos los deportes, uff, eso es de lo mejor de la Villa", remata, como colofón a su entrevista con este medio... poco antes de volver a 'casa' a disfrutar de uno de esos pocos "ratos libres".