Emerge la amenaza rusa a las puertas de Estados Unidos y un solo barco costero pasa a la acción
El buque ruso se encontraba en aguas internacionales, pero dentro de la zona económica exclusiva de Estados Unidos.

La Guardia Costera de Estados Unidos se topó con un barco ruso durante una patrulla de rutina al sur de las Islas Aleutianas. El buque se encontraba en aguas internacionales, pero dentro de la zona económica exclusiva de Estados Unidos, según ha informado el canal de noticias polaco Polsat News.
"El barco de la guardia costera no estableció contacto, pero lo siguió mientras se movía hacia el este", señala el comunicado. La Guardia Costera de Estados Unidos avistó el barco ruso a unos 48 kilómetros al sureste de la isla Amukta, parte de las Islas Aleutianas en Alaska, explicó. El incidente supuestamente ocurrió el lunes 5 de agosto.
El barco ruso también fue avistado por la tripulación de un helicóptero de la Guardia Costera estadounidense. Comunicaron que el barco "estaba atravesando aguas internacionales pero aún se encontraba dentro de la zona económica exclusiva de Estados Unidos", que se extiende a 370 kilómetros de la costa del país.
En julio, también cerca de las Islas Aleutianas en aguas internacionales pero dentro de la Zona Económica Exclusiva de Estados Unidos, una patrulla estadounidense avistó cuatro buques de guerra chinos, según ha agragado el mismo medio.
También a finales de julio, el secretario del Departamento de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, aseguró que es la "primera vez que ven" a China y Rusia "volar de esa manera", en referencia a las patrullas conjuntas con bombarderos nucleares cerca del estado estadounidense de Alaska, en la zona norte del océano Pacífico.
"En cuanto a los aviones rusos y chinos que volaron juntos en el norte, no fue una sorpresa para nosotros. Seguimos de cerca estos aviones, los rastreamos y los interceptamos, lo que demuestra que las fuerzas están preparadas todo el tiempo y que tenemos muy buenas capacidades de vigilancia. (...) Es la primera vez que vemos a estos dos países volar juntos de esa manera", expresó entonces Austin en una rueda de prensa.
Además, recordó que los siguieron "muy de cerca" y que serán capaces de volver a interceptarlos si vuelven a realizar acciones similares. "No entraron en nuestro espacio aéreo. Creo que el punto de aproximación más cercano fue a unas 200 millas (unos 322 kilómetros) de nuestra costa", informó.
Por último, reiteró la preocupación de Washington por las relaciones entre Moscú y Pekín, especialmente por el apoyo de las autoridades chinas a la "guerra ilegal e innecesaria" del Kremlin sobre territorio ucraniano.