Todavía es pronto para saber si el papa León XIV introducirá muchos cambios durante su pontificado o si optará por mantener parte del legado de su predecesor, el papa Francisco. Lo que sí está claro es que en el Vaticano se seguirá bebiendo vino español. 

Desde los tiempos de Juan Pablo II, la bodega Heras Cordón, de La Rioja, es una de las bodegas que ejercen como proveedores de la santa sede. En el caso de la bodega española, suministran un tinto que se consume en las celebraciones y que el propio papa probó durante un viaje en 2004 cuando era obispo.  

"Es un vino para eventos. El Vaticano dispone de esas botellas como considera. En cenas normales, informales, con embajadores o con presidentes. Tenemos un producto todoterreno", explicó José Luis Heras Cordón, responsable de las bodegas, en una entrevista con El Español. 

El vino que Heras Cordón suministra al Vaticano es un tinto de uva tempranillo en in 98%. Según el responsable de la bodega, pasa alrededor de 15 meses en barrica, aunque puede reducirse a 12 o extenderse a 18 en función de las catas que se van haciendo cada seis meses. 

Las bodegas producen alrededor de 5.000 botellas de este vino y envían unas 2.000 a la santa sede. Está prohibido vender las botellas restantes, que se destinan a obsequios, aunque Heras Cordón produce otros caldos similares al que beberá el papa. 

Las botellas van identificadas con una etiqueta especial con el escudo papal y el nombre del pontífice. 

¡Mantente al día con El Huffpost! Sigue todas las noticias desde tu móvil en nuestra APP. Puedes descargarla tanto para Android como iOS.