Ganar la lotería puede ser uno de los deseos más comunes. Y pensar qué se haría con el dinero una de las fantasías más recurridas. Solo unos pocos afortunados lo hacen realidad.
La increíble historia de Callie Rogers, la adolescente que se hizo millonaria de la noche a la mañana y que ahora está empeñada en cambiar las reglas del juego.
Una vieja operación matemática, usada ya en el siglo XVIII, ha vuelto a despertar el interés de inversores dispuestos a todo por llevarse el premio sin dejar nada al azar.