El lío burocrático generado por la ley del Ministerio de Agricultura que obliga a legalizar los gallineros de autoconsumo fuerza la búsqueda de alternativas.
Un Real Decreto de 2021 estableció que todas las explotaciones avícolas deben estar registradas para localizarlas en caso de que aparezca un foco de gripe aviar.
El 67% de la ciudadanía apoya prohibir este tipo de hacinamiento de aves ponedoras en toda la Unión Europea, según una encuesta encargada por la oenegé Equalia.