La mandataria dijo en un primer momento que los relojes eran suyos "fruto de su esfuerzo", pero después reconoció que "eran un préstamo" de un amigo y afirmó que había sido "un error político" aceptar dicha donación.
Ya van 22 detenidos, a los que se les han requisado bienes por 600 millones de euros, entre villas, criptomonedas, relojes de alta gama, joyas, oro y coches de lujo.
La mandataria de Perú está siendo investigada por un delito de presunto enriquecimiento ilícito y en agravio del Estado por la posesión de relojes de lujo.
Está disponible en régimen de alquiler por 3 millones de euros a la semana. El barco, de diseño noruego, mide 112 metros de eslora y tiene capacidad para 36 pasajeros.