La compañía se echa atrás en el PERTE del vehículo eléctrico, alegando un retraso en sus planes de producción en España, y buscará financiación adicional. El grupo estadounidense era uno de los más beneficiados con 106,3 millones de euros.
"A medida que el transporte se vuelve más limpio, esas otras fuentes de contaminación se vuelven más importantes", dice el autor principal del informe.