Francia quiere eliminar la nacionalidad a los ciudadanos de la isla remota

Para muchos puede que se trate de un lugar totalmente desconocido, aunque se trata de uno de los últimos bastiones que Francia continúa teniendo en altamar. Se trata de la isla de Mayotte, ubicada en el océano Índico entre África y Asia y bajo control francés desde el año 1841, aunque en el año 2011 fue cuando pasó a ser departamento de ultramar de la República.

Esto implica que todo cuanto ocurra en la isla está legislado por la normativa y constitución francesa. Actualmente, y con motivo de la inmigración masiva que desde hace unos años está experimentando el país galo, el gobierno francés se está planteando tomar medidas mucho más contundentes, como la de anular el derecho a la obtención de la nacionalidad por el simple hecho de nacer en las fronteras francesas.

Pero el matiz se halla en que esto solo tendría lugar en la isla de Mayotte, algo que ha levantado ampollas tanto en la derecha como en la izquierda del país. Los primeros consideran la medida como buena pero insuficiente, ya que creen que debería de aplicarse en todo el país, mientras que los segundos lo catalogan como una violación de derechos de los ciudadanos.

El 'derecho de suelo', más cuestionado que nunca

A esta condición reconocida por Francia se le denomina 'derecho de suelo' y desde el pasado mes de enero, son muchos los isleños que demandan acabar con él y evitar que todo el que nazca en la isla sea automáticamente reconocido como francés.

Esto se debe a que la inmigración en el territorio es, según sus ciudadanos, inasumible para la pequeña región, que cuenta con 300.000 habitantes, de los cuales solo la mitad son nativos franceses.

''Terminaremos dando la bienvenida a toda la miseria de las Comoras y de África y todo para que la gente de París pueda seguir alardeando de sus grandes principios'', se queja Estelle Youssouffa, diputada de Mayotte y perteneciente al bando independentista LIOT.

Con el objetivo de hacerse notar, desde enero están realizando multitud de controles en carreteras con la intención de exigir medidas urgentes y contundentes contra lo que consideran un problema grave, que está multiplicando los casos de violencia, crimen e ilegalidad en la isla.

En este sentido, Youssouffa reivindica que debe primar el "derecho a la seguridad y a la circulación libre", algo que denuncia que no pueden hacer: "Estamos privados (de ambos derechos) porque ahora la violencia es tan grave que ya no podemos vivir normalmente..