Gran Bretaña se prepara para una posible guerra cibernética. El secretario de Defensa del Reino Unido, John Healey, ha advertido que "el teclado se ha convertido en un arma de guerra" y planea un bombardeo millonario con armas de IA y piratería militar a la Rusia de Vladímir Putin y otras "naciones hostiles".

Según publica el diario británico Daily Express, el anuncio se produce como parte de un nuevo Comando Cibernético y Electromagnético, destinado a coordinar la lucha digital en el país. De este modo, la unidad encabezará las operaciones de piratería ofensiva y supervisará un sistema tecnológico de última generación, valorado en 1.000 millones de libras esterlinas.

"La inteligencia artificial, apodada una 'red de muerte', conectará sistemas militares en tiempo real y formará la columna vertebral del arsenal digital de Gran Bretaña", reza la publicación.

Healey ha asegurado que Reino Unido está mejorando su capacidad para atacar cibernéticamente a "estados hostiles como Rusia o China". "El Comando Cibernético es parte del establecimiento de nuevos estándares y la entrega de nueva autoridad detrás de la cibernética defensiva y ofensiva", ha asegurado en unas declaraciones recogidas por el medio.

"Estamos bajo ataques diarios, cada vez más ataques", ha agregado. "Este es el centro neurálgico del ejército del Reino Unido que nos ayuda a defendernos de estos ataques. El teclado se ha convertido en un arma de guerra", asevera.

De acuerdo a la información difundida, los detalles del arsenal cibernético de Reino Unido siguen siendo "confidenciales". "Operaciones similares en todo el mundo han incluido espionaje digital e implantes de software capaces de paralizar sistemas industriales". 

De hecho, se cree que "naciones hostiles, como Rusia o China", "están detrás de una avalancha de agresión cibernéticas dirigidas a las potencias occidentales". En el último año, el Ministerio de Defensa de ese país "ha soportado la asombrosa cifra de 90.000 ciberataques, el doble que en 2023".

"Este es un nivel de guerra cibernética que es continuo y se intensifica y que requiere que aumentemos nuestra capacidad de defensa", concluyó Healey. Además, agregó que, aunque los gobiernos anteriores habían discutido la importancia del poder cibernético, "no lo habían promovido de una manera que integrara los esfuerzos de la RAF, el Ejército Británico y la Royal Navy".

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