Pongámonos en situación. Italia. Matrimonio septuagenario, pero todavía con ganas de salir de viaje y aprovechar la autocaravana familiar. Hasta aquí todo normal, pero el desastre tuvo lugar en medio de la travesía, en una parada en la provincia de Ferrara, cuando atravesaban la Strada Statale 309 Romea, en el tramo que cruza los Lidi Ferraresi, a su paso por el territorio municipal de Comacchio.

Según recoge en una información el diario italiano Il Corriere della Sera, en la edición de Bolonia, a esa parada le siguieron horas de angustia y tensión para los ancianos. Todo se debió a un malentendido por el que ella bajó un momento del vehículo y él emprendió la marcha de nuevo. Sin ella.

En una zona próxima a Porto Garibaldi, cerca de las 20.30 horas de la tarde, percibió lo que podía ser un problema técnico en la autocaravana y se detuvo para comprobarlo. Su esposa estaba en la parte trasera del vehículo, donde se había echado a dormir. Tuvieron tan mala fortuna, que cuando hicieron la parada, ella salió por el lado contrario sin que se viesen hasta que él decidió reanudar la marcha. Y, aunque trató de alertarle gritando, allí se quedó en el arcén. En bata y zapatillas. 

Dos horas después...

Afortunadamente, varios conductores pararon al ver a la anciana tirada en la carretera. Así fue como dieron aviso a las autoridades y servicios de emergencia, que lograron contactar con el esposo, dos horas más tarde, a las 22.30 horas. Tras el evidente y lógico susto, dio media vuelta y la recogió en Porto Garibaldi, donde se encontraba  acompañada de los Carabinieri -un cuerpo de policía militar, similar a la Guardia Civil en España-.

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